Obito se encuentra aburrido mientras conversa con Zetsu Remolino y uno de los clones del Zetsu Blanco. Ellos le comentan que ellos son seres artificiales y no poseen las necesidades básicas de los humanos como comer o ir al baño. Zetsu Blanco comenta que Madara les encargó supervisar y ayudar durante la rehabilitación de Obito hasta que se recupere por completo y pueda serle útil. Además le comentan que en ese lugar no hay salida y se quejan de que Obito siempre habla de una tal Rin y un "Tontokashi", lo cual apena al Uchiha. Los vigilantes le cuentan un poco más acerca de los planes de Madara los cuales consisten en crear un mundo de sueños donde todo es posible y la paz reina.