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  • CreepyAwake
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  • Esta es una historia de un señor de edad aproximada a los 35 años que sufría de esquizofrenia. Ese señor podía ver cosas, pero nunca se atrevió a decir qué era exactamente lo que él veía; hasta una noche, en la que todo lo que se había guardado saldría a saberse por más personas. El señor se fue a dormir normalmente; se tomó sus pastillas antes de ir a dormir, se vio en el espejo del baño y de ahí a la cama, pero él siempre veía a alguien o algo en la noche, sentado en una silla mecedora que tenía. Por la ventana en la que sólo entraba la luz de la luna, él veía a alguien sentado.
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  • Esta es una historia de un señor de edad aproximada a los 35 años que sufría de esquizofrenia. Ese señor podía ver cosas, pero nunca se atrevió a decir qué era exactamente lo que él veía; hasta una noche, en la que todo lo que se había guardado saldría a saberse por más personas. El señor se fue a dormir normalmente; se tomó sus pastillas antes de ir a dormir, se vio en el espejo del baño y de ahí a la cama, pero él siempre veía a alguien o algo en la noche, sentado en una silla mecedora que tenía. Por la ventana en la que sólo entraba la luz de la luna, él veía a alguien sentado. Este suceso siempre le ocurría a las 3:14 de la madrugada, por lo que el señor no podía dormir; era como si ese ente lo quisiera despertar. Cuando lograba que se despertara, el señor veía ese lado del cuarto en donde estaba la silla: había alguien sentado ahí. Se podía ver medio rostro que le daba la luz y el otro cubierto por la oscuridad de su recámara; el señor le preguntaba: - ¿Qué haces tú aquí? ¡Te dije que te vayas! No vas a conseguir nada de mí, ¡Largarte! -El señor empezaba a tener un ataque de nervios; llorando, apretándose la cabeza, diciendo una y otra vez; "Tú no existes, tú no existes, no eres real" en su llanto silencioso; apretándose las manos detrás de la nuca, con su frente en sus rodillas en la parte media de su cama. Pero el ente seguía ahí, sentado, observando cómo el señor sufría, disfrutando cómo él muere de su propio miedo. El señor no puede moverse por el pánico, porque siente que si baja de la cama, algo le va a jalar o algo lo va perseguir. Él tenía esa sensación fuerte, y llega el momento en el que llama al 911. Toma el teléfono que está a lado de su cama en su mesa auxiliar y llama: contesta una señora que le pregunta cuál era su emergencia, cosas de siempre que te dicen al llamar a ese número público. El señor le responde: - ¡Ayúdeme, hay alguien dentro de mi casa! ¡Por favor! La señora que le atiende le contesta - ¿Quién es la persona? Señor, ¿lo ha visto en alguna parte de su casa? Él le responde con una voz seca: - Sí, está enfrente de mí; me está mirando pero no le veo ojos ni nada en la cara. La mujer, sorprendida y asustada, pensando que es un broma le dice: - Disculpe ¿Es en serio lo que usted me está describiendo? - ¡Sí! Manden ayuda, no puedo verlo más, él siempre está ahí viéndome, no sé qué hacer... - Claro, deme su dirección... - En ese instante, escucha detrás de la línea como alguien cae. Escucha un ruido de alguien convulsionando - ¿Señor? ¿Está todo bien ahí? ¿Hay alguien? ¡Señor, responda! Después de un momento, escucha un silencio total del otro lado del teléfono. Escucha un silbido, muy claro; se podía oír lo que se estaba silbando del otro lado, era la canción de Jane, I’ts Fine Day. La mujer queda muda, al no saber quién era el que estaba silbando. Luego de eso, escucha un respiro frente al teléfono, un respiro muy fuerte, muy claro; se podía escuchar que respiraba por la boca. Le contesta alguien diciéndole "Buenas noches" y se corta la llamada. En la mañana, la policía va a la casa del señor. Entran al cuarto y lo ven tirado a un lado de su cama, frío y pálido con los ojos abiertos, pero ven el teléfono tirado bajo de su silla mecedora, muy lejos de donde estaba tirado el pobre tipo. Agarran el teléfono, ven si tiene evidencia de huellas dactilares y no encuentran nada. Investigan por toda la casa, y cuando van al baño, se encuentran algo escrito que decía: "Vine por él, iré por ti, iré por todos ustedes." Desde ese entonces, el caso queda sin resolver. Nunca se supo quién escribió esa nota, quién era la otra persona que estaba en ese momento, pero hubo más víctimas. Nadie sabe por qué silbaba esa canción, pero si lees la letra de esa canción en español, habla sobre una vecindario donde hay alegría y felicidad; te da entender que es un buen día, pero queda a criterio de cada quien.