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| - Ya era tarde, la luz iba ocultándose poco a poco, la temperatura bajaba, cada vez mas frio, Un chico avanzaba a paso lento por la calle, no estaba tan transitada esa área, él seguía caminando sin levantar la mirada, contando sus pasos, tenia su ropa rasgada y estaba manchado de tierra, llego a su casa, entro en silencio y a puntillas, no quería que su familia notara su presencia, pero fue inútil, su madre salió de la cocina y se dirigió a donde su hijo para recibirle, pero se detuvo a unos cuantos pasos y sorprendida por lo que vio decidió preguntarle al joven. -“Finnian, ¿Qué es lo que te ha pasado?” -“Nada especial o grave, no te preocupes, ya sabes…mi padre se enojara si se entera que he llegado a si” Finnian le contesto sin dirigirle la mirada y con la voz quebrada, pues se retenía las ganas de llorar. Finnian es un chico de 13 años, pelirrojo, tez blanca y ojos color negro, él es un buen chico, educado, de buenos sentimientos. No era la primera vez que llegaba a si, y todo se lo ocultaba a sus padres por el miedo a que su padre le golpee, para él, el único que le comprendía era su hermano mayor, Mike. Antes de que su madre le fuera a abrazar, Finnian subió las escaleras corriendo a casi tropezarse y se encerró en su habitación, oyendo los golpes de su madre que daba a la puerta, lanzo su mochila a la cama, se sentó en el suelo y el llanto comenzó seguido de murmullos. -“ No entiendo…¿¡Que hice mal!?, siempre se la pasan molestándome” Golpeo fuertemente con su codo izquierdo la mesa de noche que se encontraba atrás de él. Los compañeros de Finnian, lo molestaban frecuentemente por sus gustos, a él le encantaba jugar videojuegos y dibujar, pero lo que dibujaba dejaba atónitos a todos, desde maestros hasta compañeros, él dibujaba lo que soñaba o tenía en mente, pero siempre dibujaba lo mismo, un chico con la boca cortada a una siniestra y sádica sonrisa, con sudadera blanca y cabellera larga y chamuscada, a un pequeño duende o elfo que lloraba sangre, a una pequeña castaña con rizos y ojos verdes que vestía una bata y tenía sangre por todos lados. Todos le miraban extrañado, se susurraban, criticaban a Finnian por ser “anormal”, su mayor y extraño gusto entre todos eran los creepypastas, en especial el de Bloody Painter y Ticci Toby, pues se sentía muy identificado, pero era eso lo que le hacía “diferente” ante los demás . De pronto se oían grandes y pesados pasos hacia su habitación, abrieron con bruta fuerza la puerta de su habitación, era su padre quien estaba furioso por enterarse que su hijo llegaba golpeado y humillado por los molestos e inhumanos compañeros de clase, tomo a Finnian del brazo y le aventó a la cama, se quitó el cinturón y con fuerza comenzó a golpear el frágil cuerpo de Finnian. -“¡¡Eres un maricón, Un inútil!!, dejando que tus compañeros te golpeen, ¿te gusta?, ¡Responde! Maldito mocoso” -“!Arthur¡ deja de golpearlo, te conté lo sucedido para que hablaras con tu hijo no para que lo maltratases a si”. Arthur dejo de golpear a Finnian y volteo a donde Julie, se dirigio donde ella, le tomo de los cabellos y le lanzo al suelo, el miedo se apodero de Finnian al ver aquella imagen donde su padre pateaba a su madre bruscamente en el estómago hasta hacer que la mujer de cabellera negra vomitara sangre, todo aquello era una horrible pesadilla que vivía a diario, Arthur salió cabreado de la habitación de su hijo, Finnian corrió a donde su madre y susurraba para recibir respuesta y sentirse un poco aliviado. -“ Mama…Mama, ¿estás bien?, necesito saber que si lo estás, responde” -“S…Si, no…te preocupes” Respondió la mujer , no había daño grave, Finnian ayudo a su madre a levantarse, ya de pie, el joven le dejo tomar asiento en la cama, Finnian se colocó de rodillas y acomodo su cabeza en las piernas de su madre y sollozando pronuncio. -“ Mama…no te preocupes, ¿El juego no ha terminado? ¿verdad?, haré que el pague lo que nos ha hecho, lo prometo…” -“Hijo mío, no te preocupes, sabes muy bien que la venganza no es buena, mi vida…aun continua el juego” La hermosa mujer sonrió, acaricio el cabello de su hijo, dejando caer unas cuantas lágrimas, Finnian tenía gran rencor a su padre, pues siempre le golpeaba o maltrataba a él y a su madre, Mike, su hermano había viajado a Canadá y no ha regresado hasta aquella noche cuando todos se dirigieron al comedor a cenar, estaba en silencio, nadie hablaba, la cara de Finnian estaba pálida, de pronto se oyeron las risas de Mike quien llego de su largo viaje, fue a donde el comedor y decidió romper la tensión que había porque simplemente no le gustaba ese ambiente. -“ ¡Buenas Familia! Miren quien ha vuelto” -“ Mike…” Mike volteo la mirada hacia su hermano menor quien dejo de comer, le beso la mejilla y dio algunas palmaditas en la cabeza de este, Finnian solo le dio una pequeña sonrisa con los ojos cristalizados por las lágrimas contenidas . Todo había ido bien desde que llego Mike, su padre no le golpeaba ni a él ni a su madre, solo se la pasaba conversando con su primogénito, había pasado ya una semana sin molestias ni golpes, lo que no se esperó ese día fue lo peor, el límite para él. Después de largas horas de estudio, alegre, Finnian guardo sus útiles, tenía pensado pedirle a su hermano que fueran a comprar un nuevo videojuego y que de paso jugara con él, pero no salió como esperaba, era el único en el salón, salió disparado del aula, fuera del plantel a unas cuadras, un grupo de compañeros le rodeo, sorprendido por aquello volvió a llenarse de miedo y pánico, uno de los chicos lo empujo al suelo, otro le quito la mochila, los restantes quien eran dos chicos y una chica le sujetaron para que no escapara. -“Acabemos con el fenómeno ,a ver, ¿Qué tenemos aquí?” El chico que tenía la mochila de Finnian, bajo el cierre y hecho un vistazo al interior, encontró algunas libretas forradas con las imágenes de Bloody Painter y una de Ticci Toby, el chico saco la de Bloody y la tiro al suelo pisoteándola, saco una caja de cerillos y prendió fuego a aquel cuaderno burlándose de su víctima quien estaba inmóvil. -“Que patético…te dices muy fan de esos fenómenos y no eres para defenderlos” El chico le escupió en la cara a Finnian, para después sacar el cuaderno de Ticci Toby, hecho una hojeada y vio que no era un cuaderno normal, era un diario, observo sonriente a Finnian y arranco hoja por hoja haciendo llorar a Finnian, terminando de destrozar la libreta, ordeno soltar a Finnian y se marchó junto con los otros, Finnian quedo de rodillas, tomo todas las hojas y las abrazo murmullando. -“Ya estoy cansado…en verdad, soy muy débil” Tomo su mochila y hecho dentro de esta lo que quedaba de su cuaderno, por suerte no le golpearon a si no tendría problemas, llego a su casa y subió rápidamente las escaleras, no se percató que su hermano le seguía, Finnian se dejó caer encima de la cama y se le erizo la piel cuando escucho a Mike. -“¿Sucedió algo, Finnian?” -“No…¿Porque preguntas?” -“Porque has llegado tarde, son las 8:00 de la noche” -“Pff…como sea, déjame en paz ¿Quieres?” Pasaron horas, Finnian se había quedado dormido, el sueño le gano, pero se despertó al oir una ronca y tartamuda voz, abrió los ojos medio dormido con la vista borrosa, no pudo distinguir lo que veía, una sombra de un chico, oía perfectamente lo que decía aquella silueta. “Va…vaya que eres…eres…fuerte…pro…pronto, es…estarás…con...con...nosotros, ¡HAHAHAHAHAHAHA!” Era sábado, despertó de golpe al recordar aquella voz y silueta, se preguntaba si acaso fue su ídolo quien le había hablado. Tomo su peluche de Tails Doll y lo acomodo aun lado de su cama, en la mesa de noche, bajo disparado como un rayo y se sentó a desayunar, su padre se veía de un humor bueno, su madre hacia waffles y su hermano leía el diario. -“¡Pero qué suerte tengo!” -“¿De qué hablas enano?” -“Ayer, en la noche oí a Ticci Toby hablarme y hoy mama hace waffles, ¡¿Acaso es una señal?!” -“Tsk…te estas quedando loco” -“No es cierto…” Fue sin duda un maravilloso día, tan rápido había caído la noche, bostezo y aviso que se iba a dormir. Mike le miro sonriente y le siguió diciendo. -“Mama, ayudare a Finnian a dormir” -“Claro cariño” Finnian extrañado asintió con la cabeza y siguió subiendo las escaleras junto a Mike, era extraño que Mike decidiera acompañarlo, al llegar a aquella oscura habitación, Mike cerró la puerta y una siniestra sonrisa se dibujó en su cara, saco de su bolsillo trasero, un pañuelo bañado en cloroformo y cubrió la nariz de Finnian hasta que se quedase dormido, abuso del cuerpo frágil de Finnian haciéndole sangrar, luego se retiró. Finnian despertó horas después, el reloj digital daba las 7 am, su cara se había vuelto muy pálida, sus ojos estaban hinchados de tanto llorar, se levanto y se colocó unos shorts de mezclilla negros, su sudadera favorita, una de color café, saco unos guantes negros y se los coloco, tomo una pequeña navaja e hizo cortes en sus piernas, brazos y rostro, saco uno de sus ojos con los dedos llenando su sudadera con sangre, se abrocho las cintas de unas botas de cuero largas hasta las rodillas. Bajo lentamente las escaleras, entro a la habitación de sus padres y mojo la cama junto con ellos de alcohol, el fuerte aroma despertó a sus padres justo cuando Finnian había encendido un cerillo, lo dejo caer en la cama, prendiendo junto con ella a sus padres, el humo y el fuego le hacía sentir placer, no se había dado cuenta, había perdido su cordura, sentado en el suelo observando la escena, de pronto sintió la presencia de su hermano quien le miraba horrorizado, su pupila se había hecho un poco chica y una sádica sonrisa apareció. -“Mi hermano…hermanito, vamos a jugar” Se levantó de golpe y Mike se echó a correr lo más rápido que pudo, pero fue en vano, Finnian apareció frente a él con un cuchillo en mano, le atravesó el estómago bruscamente y disfruto cortar cada parte de su hermano mayor llenándose de sangre, lamiendo la sangre de su cuchillo. La puerta principal se abrió y pudo observar a 3 chicos y a una “persona” de traje, uno de esos tres, Ticci Toby quien le daba la mano. -“¡Va...vamos!” -“¿El juego ha terminado?”
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