abstract
| - thumb|250px|Disección de un SimulacroExiste una progenie de xenos asquerosos y aterradores escondidos en las concurridas madrigueras de las ciudades colmena del Sector Calixis. Conocidos únicamente como material de rumores durante muchos siglos, recientemente se consiguió diseccionar a una de estas criaturas después de que se acabara con ella. La autopsia reveló una forma de vida capaz de mutar su aspecto, de aspecto vagamente humanoide, con un rostro casi sin rasgos, sin pelo y con una piel tan pálida que parece translúcida. La fisiología interna de la criatura le permite modificar su forma básica para poder imitar a otras formas de vida. Este nuevo tipo de xenos, cuya fisiología le otorga gran resistencia y flexibilidad, parece ser tan fuerte como un ser humano, aunque también es más ágil. No disponen de ninguna clase de armamento natural, teniendo que depender de armamento y corazas fabricadas por el ser humano. Según todos los informes y pruebas, esos seres (llamados Simulacros) son totalmente conscientes y son inteligentes. Son capaces de duplicar el aspecto de otros seres tan bien que son capaces de habitar entre los humanos durante largos periodos de tiempo sin despertar sospechas. Sus intenciones son desconocidas, pero nadie dentro del Ordo Xenos considera que sean criaturas benévolas. Y cuando se tienen en cuenta los hábitos alimentarios de un Simulacro, es fácil ver por qué. Para poder imitar a alguien, un Simulacro necesita consumir el cerebro de dicha persona. A través de un método desconocido, el Simulacro ingiere el cerebro completo y más o menos intacto en aproximadamente unos 5 a 10 minutos según la naturaleza de la criatura (menos en el caso de humanos y Eldar, más en el caso de un Orko). Dicha ingestión permite que el Simulacro asuma la apariencia de dicha persona, hablar con su voz, disponer de sus recuerdos, e incluso emplear sus habilidades. Sin embargo, a medida que el cerebro es digerido poco a poco (un proceso que dura unas cuatro semanas), la capacidad del Simulacro de asumir la forma o emplear las habilidades de su víctima va degradándose. Y una vez que el cerebro es digerido por completo el Simulacro deja de poder asumir dicha forma o emplear las habilidades adquiridas. Dado que un Simulacro acaba por perder el aspecto y las habilidades que obtiene de cada cerebro devorado, suele intentar cazar una nueva víctima cada semana, empleando las capacidades adquiridas de los cerebros que esté procesando en aquel momento, generalmente entre dos y cuatro. Los Simulacros tienden a buscar personas que perciban que tengan habilidades o estatus útiles. Se sospecha que de ésta forma el Simulacro va ascendiendo poco a poco en la estructura física y social de una colmena. Uno solo puede imaginarse lo que podría llegara a ocurrir si un Simulacro ganara acceso a los miembros de la nobleza de una colmena. Algunos Inquisidores postulan que la criatura podría ocultarse en una de las torres, viviendo de los miembros de las clases bajas que le trajeran sus ignorantes sirvientes, aunque otros sugieren que quizá el plan es ir trayendo poco a poco a más miembros de su especie hasta eliminar a la casa noble desde dentro antes de empezar a ocuparse de la propia colmena. La existencia de los Simulacros parece estar limitada al Sector calixis, más concretamente al Subsector Malfiano, con su gran concentración de Mundos Colmena. Actualmente, el Ordo Xenos está intentando rastrear el mundo de origen de los Simulacros (si es que acaso hay uno) para destruirlo. Curiosamente han aparecido informes de seres similares a los Simulacros procedentes de mundos externos al Subsector Malfiano. Se desconoce de si se trata del mismo tipo de criaturas o de una forma de vida completamente distinta.
|