| abstract | - En mi vida todo era completamente normal, tenía una esposa y 2 hijos, y un trabajo. Mi trabajo no era tan simple, yo era un científico, en la Corporación Sanity, nos encargábamos de desarrollar una "Unicura", es decir, que cure toda enfermedad, trabajábamos muy duro para desarrollar la "Unicura". Aunque no teníamos un nombre oficial. El día por fin había llegado. Estábamos muy ansiosos por probarlo, pero... ¿Quién se atrevería? Nadie se quería ofrecer, no sé porque, la Corporación Sanity no era una empresa muy pública. Era más privada, que otra cosa, así que, ocultábamos el experimento como un supuesto trabajo de medio tiempo. No aceptaba nadie y estábamos muy desesperados, esta forma era muy inestable y debía probarse inmediatamente, así que, decido que lo mejor sería hacerlo yo. Le dije a mi esposa que me iría por unas semanas. Así que, me prepare para el experimento, la formula debería ser aspirada en gas, sino no funcionaria, teniendo en cuenta esto, entre en la cámara de gas. Primero, me inyectaron una célula de SIDA, después soltaron el gas, lo aspire y sentí un picor en los pulmones. Me aislaron, me hacían pruebas constantes para ver como avanzaba la "Unicura". Mis signos vitales se mantuvieron normales por unos días. Hasta que llego ese fatídico día. A las 6:30 am, mientras hacia la prueba rutinaria de cada día, me empezó a doler el cuerpo, pero no era un dolor normal, era más una tortura, le grite al científico pero el no hizo caso. Me desmayo. Despierto en una sala oscura, de repente, se encienden unas luces, el científico que me cuidaba estaba ahí, mirándome. Me sonrió con una sonrisa macabra diciendo: -Bien hecho, hiciste un muy buen trabajo, debes sentirte honrado, le darás vida a al nuevo Ghost-. -¿De qué diablos estás hablando?- Respondí yo -La Corporación Sanity, nos funcionó muy bien esa fachada, en verdad, lo que aspiraste no fue la "Unicura", fue el suero GH_027, un suero muy potente, que modificara tu estructura molecular, y bueno lo otro lo descubrirás después, amigo mío, nos vemos, o tal vez no...- Él se va, dejándome solo en la habitación. Mientras pasaban los días, me sentía peor, diarrea, vómitos, me sentía muy mal, hasta que de mi pecho empezaron a salir espinas como si fueran balas. Mi cuerpo empezó a deformarse, me sentía como una gelatina. Después de eso no recuerdo nada... Desperté en medio de una carretera, solo, vació. Camine un par de kilómetros y encontré un estación de servicio, entre y cuando el hombre me vio, sentí como algo se adentró en mí, me veo las manos, no tengo, me asusto y salgo corriendo, encuentro a un vagabundo, cuando lo veo, el hombre grita, y muere. Veo mis manos y solo veo manos blancas. Desde ahí no recuerdo nada... Despierto, no puedo ver, de repente, oigo una voz que me dice: Hombre misterioso-: ¿Con que lograste escapar, eh?, bueno, te felicito.- Yo:- ¿Qué diablos me hiciste?- Hombre misterioso -: Bueno, si lo quieres saber, te voy a hacer un resumen, tú...eres...un devora almas por así decirlo, debes comer almas, sino quieres morir claro está, una de las formas de comer almas es con tu vista, pero eso sería muy aburrido, así que, lo harás con el tacto.- -Es decir que estoy ciego- Hombre misterioso:-Trabajaras para nosotros desde ahora y por toda la eternidad- Tuve que aprender a vivir sin poder ver, muy difícil pero lo hice, mi nuevo trabajo, MATAR.
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