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  • Iñaki
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  • Esta página pertenece a la Negropedia. "Ey tío, venga, que te jodan!" — Despedida habitual de Iñaki. Iñaki, Txomo, Mandraca, Charri o simplemente Puto Vasco, es un ex-colegial gazteiztarra, aunque su corazón siempre ha sido cordobés, por más que siempre ha tratado de ocultarlo. Tiene la jodiente manía de golpear haciendo ritmitos con las manos todo lo que encuentra, lo cual le ha valido el sobrenombre de tuntumpá en algunos círculos. Su afición a la batería es una indicación terapéutica de su neurólogo para tratar de dar salida a este problema.
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  • Esta página pertenece a la Negropedia. "Ey tío, venga, que te jodan!" — Despedida habitual de Iñaki. Iñaki, Txomo, Mandraca, Charri o simplemente Puto Vasco, es un ex-colegial gazteiztarra, aunque su corazón siempre ha sido cordobés, por más que siempre ha tratado de ocultarlo. Tiene la jodiente manía de golpear haciendo ritmitos con las manos todo lo que encuentra, lo cual le ha valido el sobrenombre de tuntumpá en algunos círculos. Su afición a la batería es una indicación terapéutica de su neurólogo para tratar de dar salida a este problema. Estudia arquitectura aunque tiene corazón de ingeniero, lo cual le lleva a criticar y descojonarse resignado de toda la mierda que se mueve en esos círculos de gafapasteros, culturetas de palo, chaquetas de pana y decoradores de interiores acomplejados. Aunque va de guay criticando a todos los que, por ejemplo, se interesan por el fútbol, cae habitualmente en los típicos pasatiempos como jugar al pro, chatear en el messenger durante horas o emborracharse a lo tonto. Su horario de sueño es tan retorcido que tratarlo con durvitán y otras pastillas sería perder el tiempo para la farmacología actual. Todo este ritmo de vida cambia radicalmente cuando se acerca una entrega, momento en el que inicia su estado de crisálida para terminar fusionándose completamente con el Autocad. Finalmente, puede vérsele, la noche antes, agarrando el ratón como un poseso, la cabeza gacha y dándole a la ruedecilla del zoom durante horas. Tras esto, duerme 36 horas seguidas y vuelve a su ritmo de vida normal hasta la siguiente entrega.