| rdfs:comment | - En un pueblo de nombre Gizcy, circulaba entre las bocas la leyenda de que los jóvenes, que se atrevían a acampar en su bosque, amanecían con sus mapas pintados en sangre y repletos de escrituras infantiles. Se decía que ellos siempre terminaban volviéndose locos, y que algo más sucedía... thumb|bosque de gizcy Al cabo de los años, esto dejó de pasar. Pero ahora, un grupo de amigos quería comprobar si aquella historia era cierta, o si simplemente era una leyenda urbana. Todo iba bien hasta que el sol se ocultó y sangró el cielo por el ocaso.
|
| abstract | - En un pueblo de nombre Gizcy, circulaba entre las bocas la leyenda de que los jóvenes, que se atrevían a acampar en su bosque, amanecían con sus mapas pintados en sangre y repletos de escrituras infantiles. Se decía que ellos siempre terminaban volviéndose locos, y que algo más sucedía... thumb|bosque de gizcy Al cabo de los años, esto dejó de pasar. Pero ahora, un grupo de amigos quería comprobar si aquella historia era cierta, o si simplemente era una leyenda urbana. Aquellos tres jóvenes universitarios decidieron dedicar su trabajo a la "leyenda". Tomaron su cámara y su tienda de campaña, empeñados en pasar la noche en el bosque y grabar todo lo que sucediese, pues seguro habría algo interesante. Todo iba bien hasta que el sol se ocultó y sangró el cielo por el ocaso. Cuando estaban todos en la tienda de campaña, se oyeron chillidos y carcajadas de pequeños niños. Asustados, salieron de la tienda, pero en la intriga y en el deseo de hallar algo, desenfundaron la cámara y comenzaron a grabar. Lo único que había raro en el ambiente habían sido las carcajadas. A la mañana siguiente, decidieron tomar sus cosas y volver al campus. Cuando empezaron el camino de vuelta, terminaron por notar que estaban completamente perdidos. Sacaron el mapa en su preocupación, y tal fue su sorpresa al encontrar las renombradas marcas en sangre. La pregunta que rondó sus mentes fue: ¿Quién había pintado el mapa que había permanecido en el bolsillo de uno de ellos esa noche? El pánico ahora apenas les permití moverse. No querían volver a pasar una noche allí, pero desconocían que aquel era el comienzo de la leyenda. Poco a poco corrieron las horas, y no lograban dar con una solución, drogados por el miedo al anochecer. Sin que pudiesen evitarlo, la penumbra se apoderó del paisaje. Tuvieron que armar nuevamente el campamento; tenían la esperanza de que el amanecer llegase pronto. Aquella noche volvieron a escuchar los misteriosos ruidos, y con la cámara en mano escaparon de la tienda hasta el frondoso bosque. Al mirar hacia atrás, contaron: uno, dos... Faltaba uno de ellos. thumb|left|bosque gizcy Los restantes lo llamaron y, mientras esperaban su respuesta, solo oían las carcajadas de los niños como si estos ocultasen el lugar en el que se encontraba su compañero perdido. Para cuando amaneció finalmente, ya no le quedaba una pizca de cordura al par. Sospechaban uno del otro, pensando que uno había asesinado a su amigo o le había hecho perder. Intentaron buscar una salida, pero lo único que consiguieron fue una casa en la que, según pensaban, podrían pasar una noche más tranquila. Se adentraron en la vivienda y comenzaron la búsqueda de algún alimento, así fuese dañado, ya que llevaban todo ese tiempo sin probar un bocado. Con las manos vacías, bajaron al sótano con una última esperanza y allí encontraron a su amigo, rodeado de pequeños niños que cantaban felizmente en una ronda: "Ahora os toca a vosotros". Al oír aquello, los dos chicos salieron despavoridos del sótano, pero ya era demasiado tarde. Pocos días después, las familias de los jóvenes recibieron una cinta de vídeo que mostraba la espantosa muerte de los tres hijos, grabada con su propia cámara. Entre la desdicha, solo pudieron preguntarse: ¿Quién grabó tal masacre? Categoría:Leyendas urbanas Categoría:Lugares Categoría:CC Categoría:Fantasmas
|
